Mentiras verdaderas y verdades mentirosas
Decía “Paul
Joseph Goebbels,” ministro de propaganda del gobierno Nazi de Adolf Hitler,
"Una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad".
Al leer los artículos de propaganda, que escriben los más fervientes promotores del Castro comunismo, me doy cuenta como esa frase de Goebbels sea más actual que nunca. Llevo años leyendo en periódicos, libros, noticieros, las mismas mentiras, lo peor es que las sueltan con tal seriedad, escudados detrás de un aro de luz intelectual, que da a sus palabras calidad de profecía filosófica. Nadie se atrevería a dudar de su verdad. Si a algún desprevenido se le ocurre formular preguntas o pedir explicaciones, viene inmediatamente desacreditado por ignorante, derechista, asesino come niños, amante del imperio y muchos adjetivos más
Al leer los artículos de propaganda, que escriben los más fervientes promotores del Castro comunismo, me doy cuenta como esa frase de Goebbels sea más actual que nunca. Llevo años leyendo en periódicos, libros, noticieros, las mismas mentiras, lo peor es que las sueltan con tal seriedad, escudados detrás de un aro de luz intelectual, que da a sus palabras calidad de profecía filosófica. Nadie se atrevería a dudar de su verdad. Si a algún desprevenido se le ocurre formular preguntas o pedir explicaciones, viene inmediatamente desacreditado por ignorante, derechista, asesino come niños, amante del imperio y muchos adjetivos más
Una de las
mentiras más recurrentes es la referente a “la distribución equitativa de las
riquezas”. A nadie se le ocurre explicar que las riquezas para distribuirlas
equitativamente, primero hay que crearlas. Si hay algo en que todos los
historiadores y todos los economistas siempre han estado de acuerdo, es en que
los peores productores de riquezas siempre han sido los sistemas de economía
controlada. Como muestra un botón:” Fracaso de la URSS, quienes han visto
obligados a disolver la Unión e ingresar al sistema capitalista de libre
comercio. Dulces in fundo China uno de los últimos baluartes comunista, se abre
a la economía de mercado. Pero nuestros amigos continúan empeñados en el modelo
Cubano con sus insuperables éxitos. Así nunca podrán distribuir riqueza, lo único
que serán capaces de repartir (aparte de llenar sus bolsillos con dineros del erario)
serán las mentiras de siempre.
En
América-Latina nos hemos empeñado en malgastar los dineros del tesoro público:
hemos despilfarrado enormes riquezas, nos hemos robado los préstamos del Fondo
Monetario y del BID y ahora damos la culpa de nuestros males a medio mundo, sin
ser capaces de reconocer nuestras propias culpas. Me refiero a todos los
gobiernos, sean de Derecha o de Izquierda, ninguno está exento de culpas.
Mientras no aceptemos nuestras propias faltas y sigamos buscando excusas de
nunca resolveremos nada.
Otra mentira muy común es que las empresas
extranjeras y el imperio (USA), con su enorme voracidad son las responsables de
los fracasos económicos de nuestros pueblos. Regresemos a las bases más simples
de la economía; esta nos enseña que ningún gobierno, por su cuenta, tiene la
capacidad de hacer las inversiones suficientes para crear los puestos de trabajos
necesarios para combatir el desempleo y la pobreza. Todos los países del mundo
por más ricos que sean necesitan del inversionista privado y extranjero. Ni
Estados Unidos se salva de esta ley universal de la economía. ¿Qué ha pasado
con nuestros países? Pues muy sencillo, los políticos malos que hemos sido
capaces de crear y elegir, cuando nos lo han permitido, y los que se han cogido
el mando por la fuerza, han sido tan corruptos que en combinación con las
empresas tras-nacionales se han robado todo lo que han podido y esto no es culpa
de nadie de afuera, es únicamente culpa nuestra, somos nosotros que debemos mejorar,
nadie más. Son nuestros profesores e intelectuales que deben generar educación
sana y buena enseñanza, para corregir desde adentro estos errores. Nada se
logra con la ignorancia…
Fredo Nedi
18/04/2006
Segunda revisión
0 comentarios:
Publicar un comentario